No se trata solo de sacar el polvo sino de tomar las medidas de prevención para evitar las alergias y otras enfermedades que afectan tu salud.
Dejar los zapatos en la entrada de la casa ayuda a que disminuya la cantidad de polvo, toxinas y agentes peligrosos en el interior del hogar.
Antes de comer la mejor manera de eliminar las sustancias que tenemos acumuladas por la constante exposición con los distintos tipos de superficies. Hacerlo varias veces al día facilita la reducción de bacterias y residuos tóxicos como el polvo o los químicos.
Abrir las ventanas y puertas cada día y colocar algunas plantas en varios espacios del hogar nos ayuda a mantener el aire limpio y libre de gases tóxicos. Para conservar una adecuada ventilación también puedes sustituir los ambientales por flores frescas o hierbas.
Si lo haces a diario te ayudará a eliminar los ftalatos, unas sustancias tóxicas que se derivan de desinfectantes. Es mejor aspirarlo o retirarlo primero con la escoba y luego con un paño húmedo
Una de las causas potenciales de trastornos respiratorios, dolor de garganta e irritaciones en la piel es el moho, aquellas manchas oscuras que aparecen en las paredes y superficies de la casa. Es importante removerlo para que no cause este tipo de dificultades. Para evitar su aparición hay que mantener ventilación y limpieza constante.